Terror Universal
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Seccion: Entrevistas (Lecturas: 1180)
Fecha de publicación: Septiembre de 2021

Nocturna: Entrevista a Gonzalo Calzada

En la víspera del estreno comercial de su nueva película "Nocturna", su realizador Gonzalo Calzada nos comparte la experiencia de haber podido dirigir a dos leyendas vivientes del cine y del teatro argentino, Pepe Soriano y Marilú Marini.

Darío Lavia



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– ¿Podrías contarnos cómo nació la idea de Nocturna?

– Como suele pasar muchas veces, uno va trabajando con muchos proyectos y los que terminan dando a luz es como el 5% de todo el trabajo que uno viene generando durante años... y Nocturna fue uno de esos casos que por suerte pudo dar a luz. Era una historia que había escrito hacía unos 12 ó 15 años atrás, y siempre estuve buscando el momento para hacerla. Es una película muy singular, es una película que tiene drama, tiene terror, tiene género fantástico pero está orientada o balanceada hacia el drama y hacia el thriller. Y los protagonistas son gente grande. Lo que nos pasó fue tratar de llevar adelante un proyecto, de género, de thriller, de drama, es decir, no una comedia romántica como Elsa y Fred que habla sobre la vejez, sino hablar sobre la vejez pero a partir del género, del thriller y del drama.

Gonzalo Calzada acerca de su película "Nocturna"

– Puesto en esos términos, no habrá sido nada fácil, ¿verdad?

– Fue bastante difícil de llevar adelante porque los productores no le veían la veta comercial a un tipo de producto así. Primero porque piensan que los que consumen cine de género son gente joven, lo cual en un punto es verdad. Y por otro lado, la gente no quiere dramas, lo cual también es cierto pero parcialmente. Yo creo que lo que la gente quiere, en general, es una buena historia. Si esa historia logra generar la catarsis, ya sea en la risa, el espanto o la tristeza, entonces la historia cumple su cometido. Y en ese sentido Nocturna lo cumple. Es una historia muy intensa, un poco inspirada en mis abuelos, en el tipo de relación que tenían ellos. Y agregué un suceso que los obliga a replantearse la vida. Se trabaja el concepto de la vejez pero por sobre todo el de la redención, del perdón y la redención. En una noche una persona tiene que tratar de remediar el error de casi toda una vida. Por eso "nocturna", por eso la noche. Y estoy muy contento con el resultado. Es una película fundamentalmente de actores, tiene su puesta -para mí la puesta es siempre importante- pero era una película de actores. En este caso con la singularidad de utilizar la demencia senil, la pérdida de la memoria, la desorientación, no como un elemento de perdición en el sentido de muerte sino, al contrario, como un elemento de redención y de redescubrir su propia identidad, a partir de la libertad que le empieza a dar su propia demencia o su ausencia del conocimiento de lo que fue su vida. Entonces es como un hombre grande que vuelve a ser un niño en cierto punto y se atreve a hacer cosas que nunca se atrevió a hacer.

– De eso se trata la vejez, la vuelta a la infancia...

– Esa es un poco la idea más interesante que explora la película. Y creo que está bien logrado por unas interpretaciones magistrales, de dos bestias, de Pepe Soriano, una leyenda de nuestro cine que fue todo un honor poder convocarlo y que lo haya aceptado. Le gustó mucho el guion, se lo devoró en una noche, y al día siguiente muy entusiasmado, estaba muy predispuesto a ponerse la película al hombro, un gran actor, pensá que tiene 92 años, y es protagonista de una película de género. Todos sabemos lo que signfica hacer una película de género, por más que sea un drama.

– ¿Puede ser que Nocturna forme parte de una especie de díptico?

– Sí, yo tengo siempre una manera de encarar el cine en la que trato de buscar expandir un poco las posibilidades, para aprender y que el proceso en sí me enriquezca. Nos pasó un poco con Luciferina, que se partió de una historia, tenía que ser una historia sobre posesión, una película por encargo, que nos habían encargado luego del éxito de Resurrección y bueno, también la idea de hacer una trilogía y de ahí salió la saga de la Trinidad de las Vírgenes y que ahora está en búsqueda de su siguiente parte que es Inmaculada. Te cuento esto porque es verdad. Uno encara proyectos y trata de buscar matices y llevarlos a un umbral de riesgo para que en la experimentación y en el hacer uno pueda irse enriqueciendo más. Con Nocturna lo que pasó fue que es una historia convencional, clásica, casi como un cuento de Dickens, como "Cuento de Navidad", en una noche un hombre grande tiene que resolver los conflictos de toda una vida, de su pasado, y aparecen los fantasmas para atemorizarlo, para despertarlo o para liberarlo. Y me pareció muy interesante el juego de hacer un díptico, dos películas de una misma historia, dos maneras distintas de contar la misma historia. La primera es Lado A, como en los viejos discos, que es una historia convencional, filmada con la última tecnología, digital, con los mejores lentes, es decir, una película dentro del cánon de lo que es la narrativa contemporánea.

Gonzalo Calzada acerca de su película "Nocturna"

– ¿Y la segunda, el Lado B?

– En realidad Lado B es un ejercicio experimental hecho completamente en celuloide, yo soy un fanático del celuloide, en mi etapa formativa lo usé mucho, en La puerta, en El milagro de la sangre, mis primeros cortos, y desarrollé una especie de teoría sobre el concepto de la imagen-cuerpo, que se va con el celuloide. El celuloide es el último vestigio de un modelo de imagen que ya no se repite más y que, curiosamente, tiene su génesis en el principio de la Humanidad misma, porque el cinematógrafo, el celuloide, está sostenido por tres conceptos: el movimiento, la captura de una sombra (que es la cámara oscura) y la proyección de esa captura, es decir de la cámara oscura a la linterna mágica. En estos tres procesos está puesto el concepto del cuerpo, es decir, uno puede tocar o palpar esa imagen. Esto, que se arrastra desde la época de las cavernas, prácticamente, se ha mantenido inalterable hasta el cinematógrafo. Es decir que después de la imagen digital, esto cambia. Este concepto es el que hace años estoy armando en un sello llamado Cinetopías, que vamos a largar ahora con este Lado B totalmente hecha en Super 8 y 16 mm y jugando todos los recursos en cámara, y es una película absolutamente experimental, sensorial... me atrevería a decir poética, porque tiene sus monólogos interiores, los personajes deambulan como espectros dando vueltas en esa especie de cinta de Moebius que es esa noche, en la que reflexionan y reviven una y otra vez las acciones que están obligados a vivir. Cambia el punto de vista, no está contada solo por Ulises (Pepe Soriano), sino además por los personajes que lo circundan. La verdad que el resultado fue asombroso. La experiencia ni te cuento... se filmó en paralelo. Fue una salvajada. Fue una película contada de manera independiente y sostenida sobre la estructura de la película 1. Todo esto no se habría podido hacer si no hubiéramos tenido el apoyo de Alejandro Narváez, mi socio de La Puerta Cinematográfica y asociado con Javier Díaz, de Coruya Cine, que es un loco, un productor loco hermoso, que le encanta la experimentación, arriesgarse... porque obviamente esto no tiene posibilidades de capitalización, es una película de Lado B que es un experimento, vamos a intentar moverla en festivales experimentales pero está ceñida a la película 1 y son, efectivamente, dos caras de una misma moneda. Por un lado, tenés el positivo, que es el Lado A, Nocturna: La noche del hombre grande, y el Lado B, que se llama Donde los elefantes van a morir, que es una película muy experimental y que está sostenida sobre la película 1.

– La vida, sí, pero también el cine te da sorpresas...

– La verdad que lo importante fue el aprendizaje, la búsqueda y la experimentación... y además, ocurrió algo asombroso con los actores, que se entusiasmaron. Fue como entrar a un juego porque esta segunda película se hizo de forma independiente, robándole minutos a la película 1 y buscando, a partir de la desorientación de lo no narrativo, las posibilidades de los actores.

Pepe Soriano en "Nocturna"

– Nuestros lectores querrán conocer alguna anécdota de rodaje con esos monstruos sagrados, Pepe Soriano y Marilú Marini...

– Tuve mucha suerte de conseguir una pareja increíble, Pepe es una leyenda y con sus noventa años se sentía muy capaz y muy comprometido con el proyecto desde el primer día, en que leyó el guion. Es una persona muy apasionada, parece una persona de 50 años. Tiene la energía de los grandes que los lleva a transformarse en grandes por una enorme voluntad de trabajo y una pasión gigante. Y Marilú Marini, que la trajimos de Francia, ella vive allá en Francia, también encantadora, se animó al personaje de Dalia, la mujer de Ulises, que había que avejentarla bastante y con una carga, una intensidad ese personaje tremenda, porque tiene toda una transformación El trabajo fue asombroso. Las técnicas de ellos son distintas, uno siempre va aprendiendo con los actores, cada actor tiene su propio manual, sobre todo actores que tienen tanta historia y que van armando su propio método. Y verlo actuar a Pepe nuevamente fue como mágico. Uno piensa la cantidad de películas, la cantidad de años, la cantidad de anécdotas y él era como un pibe, laburando como uno más, sentándose con todos a comer, realmente maravilloso. Y respecto a la película 2, por ejemplo, Lado B, el prestarse ellos a jugar porque terminábamos de hacer las escenas, hacíamos las secuencias con los parlamentos, y si daba el tiempo, entrábamos a hacer algo de Lado B, entrábamos con la cámara Super 8 (laburamos con cinco o seis cámaras, Super 8 y 16 mm). Había una Arri BL de 1940, 16 mm, de la época de la II Guerra Mundial. Le cargamos el chásis y de golpe, estar sintiendo el sonido del celuloide, grabándolo a un personaje como Pepe Soriano o Marilú, capturándolos, y ellos jugando a hacer cosas que uno no se imagina, es decir, a partir de la improvisación de tocar objetos, de reconocerse en el espacio, de seguir construyendo al personaje pero no desde lo dicho sino desde el cuerpo, bueno todo eso fue un aprendizaje y, sobre todo, de recuperar algo de lo lúdico dentro del trabajo porque yo, de la manera que encaro el cine, soy muy obsesivo, detallista y me cuesta mucho poder disfrutar del proceso por estar tan comprometido con el resultado que quiero lograr. Y de pronto este Lado B me permitió descontracturar eso, romper un poco los moldes y permitir esta improvisación que fue fascinante. Ellos son fantásticos y trabajando juntos, y sobre todo Pepe, que es una persona de tantos años, tirarlo en el piso, se cae subiendo escaleras, haciendo una actividad física fuerte, y todo en época de calor, porque empezamos a filmar en febrero de 2019 y fue uno de los días más calurosos... y después pasar al frío porque fueron como cinco o seis semanas de rodaje.

Marilú Marini en "Nocturna"

– Creo que te has dado un lujo pues de un solo proyecto inmortalizás a dos mitos en celuloide...

– La verdad que el cine te da esos regalos. Te permite ver lugares únicos. Espacios únicos. Te podría contar tanto de Luciferina, Resurrección en el Tigre, Luisa en la ciudad de Buenos Aires... con el cine uno recorre espacios pero también recorre actores... recorrer actores es como recorrer espacios. Son como paisajes, paisajes de forma, de trabajo, de estilo, de voces, de caras... uno los va capturando en el recuadro de la cámara y la verdad que es fascinante. Es fascinante porque son ellos en un punto con el resto del equipo, cuando se conecta todo, hacen el milagro. Uno ya lo ve en la pantalla. Ves esa imagen, o esa toma y decís "esta toma, creo que todo lo que veníamos haciendo era para llegar a esta toma, a este momento", y de esos instantes hay varios en Nocturna.

Desiree Salgueiro y Pepe Soriano en "Nocturna"

– ¿Cuáles son las películas que trataron ese tema de manera más influencial para el universo de Nocturna y también para tus gustos cinematográficos?

– Es como que la muerte espanta y la vejez más. Y la realidad es que incluso es que esta sociedad, neoliberal, capitalista y que le gusta esconder a los viejos, esconder los cementerios, dar la idea de que podemos seguir siendo pendejos, evitar las arrugas, los pliegos, la decadencia física... a todo eso, el capitalismo le pone la respuesta del consumismo, de la velocidad, de la novedad, y todo esto venía así hasta que entró el Covid y nos cambió a todos la situación. Cuando uno quiere llevar todo esto al cine, se vuelve difícil, porque lo que el capital busca como contenido son historias de pendejos, comedias, películas de terror... pero está muy presente la media, no los extremos. Entonces hacer una película sobre la vejez, orientada al terror y al drama, nos costó mucho poder concretar. Prácticamente 15 años... pero está. Yo creo que cada tanto aparecen estas películas y son fundamentales porque nos permiten amigarnos con el concepto de la muerte, y te diría más, amigarnos con el concepto de la vida, porque el que esconde la muerte, en un punto, en realidad lo que está escondiendo es la vida. La vida tiene sus límites y aceptarlo y entender eso en la contidianeidad nos permite disfrutarla mucho más que estar escondiendo la cabeza como un avestruz, debajo de la tierra, diciéndonos "yo no envejezco, yo soy un pendejo, yo no me voy a morir", cuando sabemos que eso no es cierto y nos lleva a vivir una vida que no es real.

– Concuerdo hasta en cada coma, amigo.

– Creo que hay un montón de películas que hablan de esto. A mí me gusta mucho el cine de Ingmar Bergman. He visto casi todo y sí, me apoyé en su cine, en Fanny y Alexander (1983) que es una película que me encanta y en dos películas importantes de él que habla precisamente de lo es el fin de una vida: una es Cuando huye el día (Smultronstallet-1957), película hermosa que tiene citas al viejo cine sueco mudo; y la otra es Saraband (2003) que fue su última película, una película sobre la vejez, sobre el miedo a morir y también sobre asuntos pendientes. La verdad es que estas películas fueron las que usé como base, y un par de películas más, Dioses y monstruos (Gods and Monsters-1998) con Ian McKellen haciendo de James Whale, sobre su última etapa, la etapa de la vejez, cuando está solo y se enamora de un jardinero y, más que un enamoramiento, es una historia de amistad; El cochecito (1960) el clásico español de Marco Ferreri. Y después dos películas más, que fueron de Kurosawa, el clásico Vivir (Ikiru-1950), que habla no sobre la vejez pero sí sobre la agonía por una enfermedad (saber que vamos a morir te reconecta con la vida); y Madadayo (1993) que sí habla sobre la vejez, es también la última película de Kurosawa.

Pepe Soriano en "Nocturna Lado B"

– ¿Y para Lado B?

– Y para Lado B trabajé con muchas referencias, desde Kenneth Anger hasta Jonas Mekas, todos los que experimentaron con celuloide, con la imagen vista más como una posibilidad de descripción de sensaciones y de poesía, que de narración. Esas fueron las referencias de trabajo.

– ¿Qué expectativas tenés para su estreno comercial?

– Respecto del estreno, como suele ocurrir, uno nunca sabe. Uno piensa que es una película que no puede convocar a mucha gente y de golpe se sorprende, como me pasó con Resurrección, y pensás que una película que fue hecha para convocar mucha gente no lo logró tanto como fue Luciferina. Yo creo que Nocturna es una película que conmueve, es una película que uno sale del cine con una catarsis fuerte, nos ha pasado a todos. Y eso es un regalo que la gente valora. No sé si va a tener el público joven pero creo que va a tener un público grande que es gente que se va a sentir identificada, no solamente la gente grande sino los hijos de la gente grande que también viven estas historias. Yo pienso que ahí tenemos un nicho de gente fuerte que va a poder valorar un trabajo increíble que se mandó Pepe y salir con una sensación fuerte del cine, que es lo que a uno le gusta, cuando sale del cine pensando en la película y sintiendo que algo lo conmovió de esa película, sea de la sala o de la computadora, yo obviamente prefiero que sea en una sala aunque es una películas que transcurre casi toda en un edificio y tiene una cuestión de caverna que te obliga a que estés en una caverna para verla, o sea en una sala de cine.

– Muchas gracias por compartir tu tiempo y contagiarnos el entusiasmo por la película, Gonzalo. Recordamos a los lectores que Nocturna se estrena el 30 de septiembre en el Cine Gaumont de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El sello editorial De la Fosa (también en Instagram) distribuye ejemplares de la novela Nocturna de Gonzalo Calzada, el tercer eslabón de este interesante proyecto.

Pepe Soriano y su ejemplar de la novela "Nocturna" de Gonzalo Calzada

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