Obras Maestras del Terror: El Corazón Delator

Episodio de TV, Canal 7, 3 de agosto de 1959

Reparto

Narciso Ibáñez Menta .... Thornborn
Narciso Ibáñez Serrador

Créditos Técnicos

Basado en la obra de Edgar Allan Poe
Dirección: Martha Reguera

Narciso, padre e hijo, agentes del terror

Fuente: Antena TV, Nº 1627, 31/07/1959

Narciso Ibáñez Menta y Narciso Ibáñez Serrador se han aliado para provocar instantes de miedo a los desprevenidos telespectadores. A partir del próximo lunes, a las 23.30, el primero protagonizará un ciclo titulado "Novelas de terror", sobre un libro que lleva la firma de Luis Peñafiel, seudónimo detrás del cual esconde sus inquietudes literarias "Chicho" Serrador.

Fotografía: Sin referencia

Excelente muestra de arte en la TV

Fuente: La Nación, 05-08-1959

No hay dudas que Narciso Ibáñez Menta ha tornado a su personaje de "El corazón delator", de Edgar Allan Poe, en una de las caracterizaciones mejor logradas de la televisión.

El viejo y avaro relojero está encarnado y vivo en los rasgos físicos, con un rostro sombrío y diabólico, con su cuerpo agobiante y agobiado, y con un hálito que nace en el solitario y egoísta sin piedad.

Existe, como bien se insinuó en el programa, una diferencia notable entre la obra denominada de suspenso, en la que se busca "horripilar" por medios crudos y folletinescos, caracteres y los cuentos de terror, que trascendidos por el arte de un escritor de literatura fantástica, como Poe, ennoblecen esa materia y esos caracteres, aunque se manifiesten más allá de la crueldad.

En otro momento - se televisa los lunes a las 23.30-, "Obras maestras del terror" hubiera encontrado la dificultad que hemos venido señalando en estas páginas por los temas. Pero, a dicha hora, este programa logra mostrar, al par que difunde una obra literaria notable, el quehacer de un actor maestro en la presentación de personajes que se distinguen por un complejo, por un vicio y por su falta de virtud dentro de la sociedad.

Escenas como las que muestran la noche y los relojes que laten como corazones, cuando Ibáñez Menta imita el tic tac moviendo las manos, y cuando atemoriza a su presunto sobrino en este ámbito de terror - relojes, misterio, noche- bastan para aplaudir a un actor.

Por su parte, Narciso Ibáñez Serrador logró su mejor impacto -dentro de esta versión libre del cuento de Poe- cuando enfrenta a su tío, en el instante que éste habla de la imperfección de un jarrón, o -con un característico movimiento de la mano- indica de qué manera caminaba con muletas un niño lisiado.

El desenlace, es decir, la locura del personaje que encarna Ibáñez Serrador frente a los policías es digna de ser destacada dentro del clima tenso que crea un "Corazón delator". Muy buena la fotografía y excelente la compaginación de Marta (sic) Reguera. El próximo lunes se podrá apreciar a Narciso Ibáñez Menta en "El caso de Mr. Valdemar", otro relato fantástico de Poe.

Feliz retorno de Narciso Ibáñez Menta

Fuente: Antena TV, Nº 1629, 14/08/1959

Narciso Ibáñez Menta hizo un auspicioso retorno a la TV, iniciando un ciclo titulado "Obras maestras del terror". Se ha elegido un horario apropiado - los lunes a las 23:30 horas - y a la par que permite al actor reeditar sus conocidas caracterizaciones, no se apela a ellas conuna simple finalidad efectista, sino que sirven para remarcar el complejo anímico de los personajes. Las dos primeras presentaciones, con "El corazón delator" y "El caso de míster Valdemar", adaptaciones de Narciso Ibáñez Serrador de dos cuentos de Edgar Allan Poe, fueron muy buenas.

Fotografía: Sin referencia

¡Maravilloso horror!

Fuente: Antena TV, Nº 1630, 21/08/1959

No sería justo dejar pasar estas páginas sin destacar la labor maravillosa de Narciso Ibáñez Menta en el teleteatro de suspenso y horror del lunes. Otro tanto para Osvaldo Pacheco, y destaquemos muy especialmente la labor de las cámaras conducidas por Martha Reguera. Nos contaban que , en el espectáculo del lunes anterior, Narciso estuvo desde las 19 horas hasta terminado el programa con la caracterización sobre su cara: ojo de vidrio y todo lo demás. Un sufrimiento que bien podría anular la labor interpretativa, si no se tuviera la "pasta" de actor de Narciso. ¡Horacio Pisani, el maquillador feliz! Lo que Narciso no sabe es que Martha dirige desde el control y se muere de miedo. ¡Así es de impresionante lo que enfoca!